MC Salud

Hacia cinco minutos que prácticamente recorría el lugar. Hasta el momento todo se registraba como algo normal, nada sobresalía fuera de mi entendimiento y no se producían incertidumbres en mí. Entonces fue ahí, en plena calma que empecé a notar algunos detalles. Primero todos pasábamos por un mostrador esperando el turno para la consulta; precisamente tomando la elección de que íbamos a consumir hoy, ¿serán papas?, ¿serán acompañadas de una gaseosa?, ¿y que será grande o chica? ¡Claro había estado días esperando este momento, nada lo podía arruinar!

Luego de pasar este momento donde felizmente realizo mi elección, me da una gran curiosidad el uniforme que presenta los empleados que se encuentran tras el mostrador y su complementariedad con el lugar. Aunque rápidamente logro darme cuenta que no era nada que interviniera en este momento y de que solo era una cuestión de moda y presencia. Detalle que generalmente suelen cuidar las empresas privadas en forma minuciosa. ¡Y hasta exagerada!

Otro punto fundamental de mi reflexión, antes los parámetros que yo venia considerando como algo normal en este campo, fue el acceso reducido a este recurso. Es decir cualquiera no podía acceder a tal bien, sino que para su acceso se debía contar con una cierta disposición de recursos monetarios. Por lo tanto, su entrada y salida, estaba limitada a un cierto sector de la sociedad.

Aunque lo que más termina llamando de mí la atención, era la gran cantidad de gente que entraba, pagaba y salía con su aperitivo por decirlo de alguna manera. Claro eran unos tras otros, constantemente y continuamente durante todo el período de atención.

Este es el momento fundamental donde todo de lo que venía siendo casi normal para mí, empezó a dejar de tener sentido.

Porque siguiendo este relato empecé a darme cuenta, que lo que yo estaba describiendo era muy parecido a un McDonald o local de comida rápida. Pero por más controvertido que parezca, mi presencia no se ubicaba ahí, sino en un consultorio médico privado o más precisamente clínica de ojos.

Por un momento pensé que mi corta visión era la causante de mi confusión. Pero lejos de eso comprendí que me encontraba atrapado en un sistema, donde la salud y la medicina son un negocio. Y por supuesto de grandes ganancias. Donde empresas y empresarios, tratan de explotar al máximo sus ganancias, poniendo en juego la vida de las personas.

Y que no solo el funcionamiento burocrático tenía esa fría característica. Sino que también y generalmente el acento se nota en la misma recepción que se le hace al paciente. Siendo éste víctima de un manoseo capitalista, que más que encender la revuelta, termina avasallando y desmoralizando cualquier pensamiento de insubordinación. Haciendo prácticamente imposible el escape del sistema.

por Er.-

La realidad que nos crean

¿La gente de la ciudad apoya al campo? ¿Por qué protesta ahora el campo? ¿Qué es la gente? ¿Quién decide quienes son "gente" y quiénes piqueteros? ¿Los piqueteros son o no son gente? ¿Qué es el paro? ¿Quiénes paran? ¿Por qué paran? y fundamentalmente ¿Que papel cumplen los poderosos (multi)medios en todo esto?



Cuando existe un corte de calles llevado a cabo por personas que reclaman por una vida digna, no es raro que nos enteremos de esto como "piqueteros cortan el transito". Y esto perjudica a la "gente" que vuelve de trabajar.



Mientras tanto cuando el corte que impide circular por una ruta es realizado por los grupos terratenientes ubicados en la cima de la pirámide social, la realidad llega a nuestros oídos como "la gente que se acercó espontáneamente para apoyar al campo". Y que este paro, que están llevando adelante esta dejando sin comida a todo un país, que en este caso no es gente, no importa.



Los medios masivos de comunicación crean una realidad, que no es azarosa, ya que tienen intereses de por medio. Partiendo de la base de que los medios son manejados por grandes empresas, que poseen ganancias mas grandes aun, podemos llegar a "imaginar" que los intereses a defender son los de la parte más alta de la pirámide.



¿Será que empezamos a responder algunas de las preguntas que nos hicimos al comienzo? Ninguno de nosotros habló con representantes de las zonas rurales, la realidad llega por lo que nos cuentan. Y si están eligiendo que contarnos, nos están dibujando la realidad.



Las retenciones, tan famosas hoy en día, fueron aumentadas, es cierto. Este impuesto aplicado a la exportaciones de alimentos siempre tuvo el mismo valor tanto para los "pequeños, medianos o grandes" productores agropecuarios. Si aumentó para unos, lo hizo para otros. Por lo cual, no es una bandera válida refugiarse en que este aumento es el que perjudica a los sectores minoristas. Ya que de considerarse perjudicados, esta situación no es nueva, y no justifica estas manifestaciones. De hecho, esos sectores mas humildes del agro, tienen subvencionado el gasoil (a precio del año 2003) y el valor de sus terrenos aumentó casi un 1000%, según palabras del ministro del Interior, Aníbal Fernandez. Además el valor del dolar, sigue favoreciendo el desarrollo de la economía rural.



Esta realidad, expresada en el párrafo anterior, difiere de la que los medios de comunicación nos muestran.




De hecho este es un titular del martes 26/03/08

La nación On line - 22:08

Piqueteros oficialistas volvieron a tomar posesión de la Pirámide de Mayo, mientras la gente que se acercó espontáneamente para apoyar al campo se congregó en el Obelisco; hubo enfrentamientos; denuncian falta de presencia policial

Los oficialistas, no son gente. Son piqueteros.
La gente apoya al campo.
¿Vos te consideras gente? Entonces apoyá al campo, no lo dudes.




Este manejo se repite no sólo en los medios gráficos ( o sus portales web) sino también en las radios y canales de televisión. Y este fenómeno no solo se da por la forma de mencionar o de referirse a los grupos involucrados. Sino también (y sobretodo) por el recorte de información. Mostrar una marcha sin explicar los motivos, es una forma de alentar a manifestar sin saber el porqué.



El jefe (patrón) de la ciudad, macri, por su parte afirma en TN que "la solidaridad de los grupos urbanos al agro se hace notar". Sería interesante que algún calificado periodista de este medio que nos representa a TODOS NOSOTROS, le preguntara a mauricio si vió alguna vez manifestarse a los señores de las 4x4 residentes en zona norte para solidarisarse con las víctimas de cromagnon, o por los desaparecidos, o quizás por el hambre en el conourbano.




Cuanta gente que no es gente se hace llamar así. Y como esa no gente nos engaña a Todos Nosotros.

por peperino.-

Para NO olvidar

Hoy se cumplen 32 años de lo que fue el peor capítulo de nuestra historia contemporánea, el maldito golpe de estado de 1976, pero que por haber sido lo peor, no debe ser olvidado por ningún argentino. La memoria debe permanecer activa para que el terror NO VUELVA JAMÁS.

La dictadura militar devastó a la Argentina y la sometió a la peor de las pesadillas. Persiguió, secuestró, torturó, mató y desapareció a más de 30 mil personas que hoy, desde la memoria de sus familiares, piden justicia por los crímenes de lesa humanidad de los cuales fueron víctimas. No olvidemos que dentro de ese grupo de hombres y mujeres está Jorge Julio López, que con valor declaró en el juicio al represor Etchecolatz y poco tiempo después no supimos más de él. Eso fue un mensaje, mafioso, para imponer nuevamente el miedo a todos aquellos testigos dispuestos a declarar en los diferentes juicios, que se tendrían que haber llevado a cabo hace tiempo, y que por distintas razones las causas siguen encajonadas en los diversos juzgados.

En estos tiempos se han logrado cosas muy importantes al respecto, como por ejemplo la condena, por genocidio, al “asesino episcopal” Christian von Wernich. Si bien esa causa llegó a buen puerto, no es suficiente para calmar tanto dolor.

No olvidemos tampoco, que ese accionar “del miedo” actuó también en democracia. Cuya cabeza de eso fue López Rega, más conocido como “el brujo”, con su famosa “AAA”.

Según mi entender “el proceso” dividió a la sociedad argentina en diversos fragmentos: por un lado están aquellos que por ideología, “fascista”, coinciden con los hechos de aquel tiempo y con el accionar militar; por otro extremo se ubican, los que luchan por la verdad y justicia, y no dejan que todo quede en el olvido; por otro lado se hallan aquellos que, en su momento, no se dieron por enterados, son los pertenecientes a las generaciones que vivieron la dictadura en su juventud, obviamente sin generalizar, y hoy a la hora de hablar del tema te dicen: “Si no andabas en nada raro, no te pasaba nada” o el famoso “algo habrán hecho”. Pero también y lamentablemente existen en Argentina otras generaciones, de jóvenes en la actualidad, que están ocupados en otras cosas, totalmente vacías de contenido y no se preocupan por saber la verdad de lo que paso realmente. Y así podría seguir un buen rato describiendo a nuestra sociedad que, como dije antes, tan diversificada se encuentra.

Por estas y muchas otras razones más, debemos seguir luchando para que aquellos crímenes no queden impunes. Cada ciudadano puede aportar lo suyo, con el sólo hecho de informarse y preocuparse por lo que pasa en el país. De esa forma los políticos no se burlarán tan fácil de nosotros, como hace tiempo lo hacen.

En fin, hay tanto para decir y reprocharnos como sociedad, que ya las palabras no alcanzan. Por ende los hechos que desde hoy, y para siempre, le exijamos a este Gobierno y a los venideros, podrán dejar tranquila nuestra conciencia ciudadana; o por lo menos darle un motivo a las generaciones futuras, para que puedan decir “algo habrán hecho”, pero esta vez en defensa de los derechos humanos y en homenaje a todos los desaparecidos por el proceso. Ya que aquellos, los que hoy no están, fueron los verdaderos luchadores que desde sus distintas posiciones, en lo que a partidos políticos respecta, trataron de forjar un destino distinto y mejor.

Sólo esperemos que este día signifique mucho en nuestras vidas, para que podamos educar a nuestros hijos con una mente más luchadora y sin mentiras. Y que hoy 24 de marzo no sea un día más para disfrutar el fin de semana largo y olvidar el verdadero sentido de este feriado (MEMORIA). No quitemos nunca el apoyo a LAS MADRES, ABUELAS E HIJOS DE PLAZA DE MAYO, que son los que más sufren y luchan en busca de justicia.

Para cerrar este humilde pero muy sentido texto, haré uso de las palabras que ya son del pueblo: “Juicio y castigo” a todos lo que de alguna manera u otra trabajaron a favor del proceso y la desaparición de personas. “NI OLVIDO NI PERDON”.

por Velche.-

Caminos

Se abren caminos, todo el tiempo. Algunos son lejanos, oscuros y difíciles. Otros en cambio son cercanos, tentadores, fáciles y hasta prometen una victoria segura.

Lo fácil tienta, pero no siempre el brillo indica riqueza. Si bien sabemos que es probable que el tentador sea uno más de tantos espejismos que nos llevan a lugares sin destinos, o caminos circulares que nos devuelven al principio, muchas veces tomamos estos atajos a la derrota.

Lo difícil cansa, aun antes de empezar a recorrer sus pasos. Parece una montaña que hay que escalar y no tiene ningún sendero marcado. Se presenta como incierto, oscuro y resulta desalentador hasta para el mayor de los inescrupulosos vividores de hazañas.

Entonces cuando uno deja de pensar y se choca con todo un mundo que abre y cierra caminos por placer, luego de haber cosechado miles de tropiezos y algún par de trofeos, se da cuenta de que el camino no es sólo ese espacio que une dos lugares.

Una suma de decisiones que nos hace caer, levantarnos, sonreír y desangrarnos a lágrimas, son nuestro único camino. Que un día nace y otro termina.

por peperino.-

Pasen y vean

Hay una realidad que nos interesa compartir. Muchas veces parece que no hay ideas. Por eso es que en este espacio nosotros, los nadies, queremos mostrarnos y convencernos a nosotros mismos que podemos sentir.


Y quizas en una de esas, hasta podamos saber que no somos tan nadies como nos hacen sentir.


El lunes 17 estaremos empezando. Sin grandes entrevistas, sin grandes argumentos, pero creannos que corazón no faltará.


Pasen y vean.